martes, 30 de noviembre de 2010

La Generación CAR rumbo a la Conferencia Nacional de Jóvenes por el Ambiente

Hubo una época en Bogotá cuando diciembre gozaba de un clima agradable. Este no lo será mucho. Esperamos que sí. Se presagia invernal. Deseamos buen clima los días 1,2 y 3. Los efectos del cambio climático han llevado a que este fin de año sea frío durante los tres días que durara la Conferencia Nacional de Jóvenes por el ambiente, en la que participaran, invitados por la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca – CAR, 30 de los líderes ambientales, menores de 26 años, más destacados del territorio CAR. Cuando estén juntos, el clima y La Niña no serán impedimento para trabajar por el ambiente.

La Universidad Agraria de Colombia, lugar que albergara el evento luce su mejor traje. Las talleristas Johanna González (Chia) y Yury Quiroga (Sutatausa) que representaran a los jóvenes de la Generación CAR, repasan sus intervenciones. El objetivo principal de la Conferencia es posibilitar un espacio de diálogo, reflexión, intercambio de experiencias para que jóvenes de todo el país reconozcan, identifiquen y definan las problemáticas socio-ambientales y se apropien localmente de compromisos globales, asumiendo responsabilidades para la construcción de comunidades sostenibles, y fortalecer la red nacional de jóvenes de ambiente.

Los socios de honor de la Generación CAR alistan maletas. Ya enviaron los diagnósticos Socio-ambientales, requisito para inscribirse. Se preseleccionaron unas 100 solicitudes. Finalmente, al menos un representante tendrá cada una de las provincias de la jurisdicción. Colchonetas, ropa para 3 días, bandera, fotos, videos, los proyectos para el intercambio de experiencias con 200 jóvenes de todo el país, reposan a la espera de la hora cero.

Los primeros en partir serán los delegados del Rionegro que viajan desde Topaipi. Casi al tiempo los jóvenes de Puerto Bogotá en el Bajo Magdalena tomaran una carretera menos tortuosa. Posteriormente las mujeres de Girardot y Agua de Dios y la delegación de Chiquinquira emprendaran el viaje. Por el camino de esas rutas se uniran los demás participantes que a partir de las 10 de la mañana del primero de diciemnbre, se reuniran en Bogotá para demostrarle al país que en el territorio CAR ¡Por el ambiente nos la jugamos toda!

lunes, 22 de noviembre de 2010

El personero de las llantas IV

Yesid Baraceta Fandiño en la I.E.D de Carmen de Carupa

Yesid Baraceta es uno de esos seres de otros tiempos, dedicados a las artes y las ciencias que encuentran la grandeza en ponerse al servicio de la sociedad. Apreciando en su rostro el sentido estricto de la responsabilidad, hay quienes señalan que esté adalid heredó el poder de sus ancestros, quizás trasmitido por la Ceiba que engalana el parque principal del municipio, arbusto que en las culturas prehispánicas era considerado planta sagrada, a través de la cual se comunicaban los dioses con su pueblo. A lo mejor sean las ganas de vivir en el mundo soñado, el alimento de su emprendimiento. Hasta para él es difícil determinar en qué momento su vida se consagró al servicio social ambiental. Sin caer en demasiadas reflexiones se considera que en él todo ha sido casualidad; una casualidad ha llevado a la otra, hasta lo que es hoy, un hombre maduro a los 19 años, con cientos de quimeras por realizar, si es que las casualidades se siguen cruzando a su favor. 
Fusiona el estudio y las funciones de personero con otras actividades lúdicas y laborales. Durante 11 años bailar en el grupo de danzas municipal fue su pasatiempo preferido. Dio un paso hacia los instrumentos, para ser el todero de la banda marcial, hasta convertirse en director, cuando fue trasladado el profesor que la dirigía. Tomó el legado y en el camino cultivó el espíritu docente. Prueba de su talento es haber obtenido, en Sopo y Machetá, el galardón de mejor bastón mayor, en encuentros departamentales de bandas. A la música y el baile suma la pintura a sus habilidades. Las celebraciones del bicentenario y las ferias y fiestas son actos engalanados con sus dibujos. Él puede decir que vive de las artes, que gracias a sus trabajos obtiene algunos ingresos económicos, muy valorados cuando se depende de si mismo. Aunque desearía poder mantener un buen nivel de vida con las obras de su inspiración, sabe que a los grandes artistas la vida no les trató bien en sus inicios. Yesid, desde los 14 años trabajó de cotero en la plaza de mercado y en cuanta labor se le ha presentado. Todo se hace con fe en el señor, y hace de todo, incluidas tareas religiosas, como haber sido misionero en el municipio de Gama – Cundinamarca durante las vacaciones de grado once. Para todo tiene tiempo.
Así es un trozo de la vida pública del personero apóstol del medio ambiente en la provincia de Ubaté. Los golpes le llevaron a pasar de la indisciplina constante a ser el ejemplo de superación del municipio. Hijo de padres campesinos, criado por los abuelos, es el mayor de 5 hermanos de los que poco sabe. Su madre falleció en 2005, su abuela 5 años después. Con su padre nunca ha cultivado relaciones cercanas. Habita sólo en un apartamento del centro del municipio. Desea estudiar filosofía aunque no sabe cómo se va a costear la carrera. Ya habrá tiempo para pensar en ese tema a profundidad. Es un líder juvenil a quien la política no lo seduce, pero es un trabajo que puede servirle para costearse parte del estudio y ayudar a los demás. No lo descarta y es probable que siguiendo las recomendaciones de muchos habitantes que admiran su trabajo, aspire a ser concejal para las elecciones de 2011, y continuar su labor social ambiental, desde nuevos escenarios.
Si hoy fueran las elecciones para personero, obtendría la totalidad de los 1115 sufragios posibles. Su popularidad es total, su aceptación del 100%, el cumplimiento del proyecto social que ofreció a sus compañeros se cumple a cabalidad. En campaña recorrió el municipio en moto prestada, con el cómplice de sus aventuras, visitando los planteles colectivizando su proyecto de gestión ambiental. Ahora lo recorren, en fiel compañía de sus seguidores, entregando las obras prometidas al electorado.
—A cada día toca aprenderle algo para que tenga sentido— dice. Vaya qué se lo ha encontrado a todos, el personero de las llantas. 

jueves, 11 de noviembre de 2010

El personero de las llantas III

Los primeros compromisos se plasmaron en la sede principal del colegio. La empresa privada donó parte de la materia prima: Gravas de Carupa y Agregados La Milagrosita le han colaborado con algunas llantas y material para arreglar el sector donde se instalan las obras. Las llantas restantes, se han retirado de los páramos y las cunetas de las principales vías del municipio. Á Yesid hay que creerle, me dice un desprevenido alumno, por eso gentes que no tienen relación con la institución le ayudan. A sus votantes les cumplió, las once canecas prometidas se encuentran ubicadas prestando servicio al medio ambiente. En cada una de las diecisiete sedes alternas se instalaron tres canecas. Diecisiete sábados de los 52 del año, ha viajado, a pie o en el camión del papá de Carlos Nieto, un compañero de grado décimo, recorriendo las veredas para elaborar las canecas e instalarlas en el lugar prometido. Siempre le acompañan 50 escuderos quienes se reparten funciones entre la limpieza y mejoramiento de la institución, mientras otros producen las canecas y las ubican, al tiempo que enseñan cómo hacerlo a pequeños aprendices, de la sede beneficiada, idólatras del personero. El combustible del camión es costeado por todos los ayudantes; Andrés conduce. Andrés es el menor de una familia de cultivadores de papa en la zona, hijo de unos padres convencidos de la importante labor que él y sus amigos hacen para proteger el ecosistema. Nunca han tenido inconveniente en ayudarles. Cuando se les pregunta a padre e hijo por un concepto atinan a decir —por fin hubo un personero que hiciera algo. El otro año se debe elegir a alguien que ofrezca continuar el proceso de cambio. Sobre todo que fortalezca la concientización que ha sido lo más difícil de lograr—. Además del proyecto de las canecas con llantas de carros, el personero es el encargado de impulsar el Proyecto Ambiental Escolar – PRAE y promover otras actividades, entre las que se encuentran el reciclaje de plástico o el embellecimiento del campo deportivo del plantel a partir de llantas que lo delimitan de muros y jardines.
Caneca I.E.D. Carmen de Carupa
Son en total 62 canecas que la administración del personero estudiantil de la I.E.D. de Carmen de Carupa entrega al servicio de la comunidad educativa, que supera los dos mil integrantes. Un ejemplo a resaltar en un país que ha debido regular el destino de las llantas en desuso. Mientras los jóvenes del frío poblado se ocupaban de darles mejor vida a decenas de llantas que ensucian su terruño, el Ministerio de Medio Ambiente Vivienda y Desarrollo Territorial expidió la resolución 1457 de 2010 por la cual se implementa el Sistema de Recolección Selectiva y Gestión Ambiental de Llantas, la cual “tiene por objeto establecer a cargo de los productores de llantas que se comercializan en el país, la obligación de formular, presentar e implementar los Sistemas de Recolección Selectiva y Gestión Ambiental de Llantas Usadas, con el propósito de prevenir y controlar la degradación del ambiente.” En esta “se prohíbe: a) El abandono o eliminación incontrolada de llantas usadas en todo el territorio nacional. b) Disponer las llantas usadas en rellenos sanitarios. c) Enterrar las llantas usadas. d) Acumular llantas usadas a cielo abierto. e) Abandonar llantas usadas en el espacio público. f) Quemar llantas a cielo abierto o cerrado de manera incontrolada. g) Utilizar las llantas usadas como combustible sin el cumplimiento de lo establecido en la resolución 1488 de 2003, o la norma que la modifique o sustituya”. De ahora en adelante las llantas serán tratadas, y se determinaron unos plazos para la implementación. Sin embargo, estamos seguros que personeros estudiantiles como el que tiene Carmen de Carupa, es necesario que sigan existiendo para ayudar a la CAR, a los municipios y a Colombia en la tarea de mantener un mejor país, ambientalmente sostenible.

miércoles, 3 de noviembre de 2010

El personero de las llantas II

Yesid Baraceta enseñando a elaborar canecas

La vida útil de una llanta es de un año y medio, en el mejor de los casos. En el país se comercializan unos 4.5 millones al año. Según el Ministerio del Medio Ambiente Vivienda y Desarrollo Territorial, de cada 100 llantas cambiadas, 95 se tiran a basureros comunes y 5 se reutilizan. La fabricación de una llanta demanda medio barril de petróleo, además de cobre y plomo, entre otros componentes tóxicos. El aporte colombiano al problema de la contaminación con estos materiales es de 61 mil toneladas de llantas anualmente. Son material no biodegradable que requiere un tratamiento especial para reducir su impacto en el ambiente. Ya habrán visto el daño que producen al quemarlas. Al ser enterradas emiten gases efecto invernadero que llegan a las corrientes de agua y al aire, afectando a toda una sociedad. Las que son tiradas a cielo abierto se convierten en hogar para mosquitos productores de dengue, ratas y otros animales, sin sumarle los efectos en la contaminación visual.

Es probable que los carupanos desconocieran estos impactantes datos antes de ver a Yesid recogiendo llantas y puede que él tampoco estuviera enterado. Tan excepcional circunstancia le da más valor a su misión social. Darles un uso, fue algo que nació de la inventiva, de la preocupación que causa amar a un municipio y al recorrerlo encontrarlo sucio y maltratado.

Para obtener de una caneca se requiere una llanta de camioneta. De cualquier tamaño. Él prefiere las medianas. Se debe tener a la mano bisturí, puntillas, un metro de malla y tres maderos que sostendrán la obra final. Para decorarla, según el gusto, es necesario pintura y brochas. Primero se lava la llanta en desuso, se corta con el bisturí una tapa por la medianidad de una de las caras laterales, se retira y viene la parte difícil del proceso; entre cuatro personas, apoyándose con las rodillas, dan la vuelta al caucho, de tal manera que la parte exterior se convierta en el anverso, lo que origina que el neumático tome forma de olla.  Surtido el complejo paso, se toma la medida de la malla que se requiere para ser el fondo de la caneca, se asegura con el trozo inicialmente cortado de un lateral de la llanta y se clava con puntillas para que sostenga con firmeza el peso de la basura. Teniendo la medida del radio de la caneca, en el suelo se perforan dos orificios donde se entierran los maderos que la sostendrán, se instala está a una altura media, se apuntilla contra los maderos, se decora con pintura y es puesta al servicio de la comunidad estudiantil. En la parte superior se atraviesa un trozo de tabla al que se le escribe un mensaje ecológico llamativo, invitando a los estudiantes a usarla y no tirar la basura en los corredores y zonas verdes. No es fácil pero la práctica lleva al mejoramiento de la técnica.